GUSTAVO
BRICEÑO VIVAS | EL UNIVERSAL
Martes 12
de noviembre de 2013
Ciudadano
viceministro para el Poder Popular de la Suprema Felicidad: Me dirijo a usted,
de conformidad con lo establecido en el artículo 51 de la Constitución
Nacional, y 2 de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos con la
finalidad de exponerle lo siguiente: Me enteré por los medios de comunicación
social, (fui notificado en cadena nacional) que en mi país ahora existe
un ministerio para la felicidad total del individuo, entiendo entonces, que
existe la posibilidad de que los venezolanos podamos ser felices, porque así ha
sido decretado por el ciudadano presidente de la República Bolivariana de
Venezuela. Si esto es así, y espero que así sea, solicito o mejor pido, por
medio de este recurso administrativo, muy respetuosamente lo siguiente: Que haga
uso formal de todas sus competencias y atribuciones que le confiere la ley de
la materia, para que me consiga principalmente lo que le describo: Quiero ser
feliz desde el punto de vista económico, es decir, que los precios de los
productos de primera necesidad bajen su valor, y me alcance el sueldo que gano
producto de mi profesión; quiero ser feliz, para no angustiarme tanto por la
inseguridad que sufro a diario, para evitar que me asalten o me quiten el
dinero que me gano con el sudor de mi trabajo; quiero ser feliz para tener unos
servicios públicos que pueda utilizar y estar contento en un país un poquito
mejor que el que tenemos; quiero ser feliz, para evitar encontrarme con
las colas que a diario sufro cuando voy para mi trabajo; quiero ser feliz, para
que cuando marque el teléfono de mi celular, la otra persona conteste sin
problemas de interferencias o eso que de repente dejo de oír sin razón alguna;
quiero ser feliz, para reírme en el tráfico y hacer reír al otro que va en el
otro carro, en fin, quiero ser feliz para que cuando me llamen del exterior o
yo llame, no tenga que decirle a esa persona que Venezuela es un desastre y que
vamos por muy mal camino.
Además, quiero ser feliz, para que el dólar baje y el bolívar suba, y entonces pueda comprarme mis cosas todo contento y entusiasmado; quiero ser feliz para que quiten a esos sargentos que se encuentran en la Asamblea Nacional, sean más educados, y no se lo pasen insultando como en un cuartel a todos los otros que no están de acuerdo con ellos; quiero ser feliz, para evitar por favor, de decir que todo lo malo que pasa en el país es por culpa de los gringos o del imperio, la infelicidad me ocurre, sobre todo por el aburrimiento de oír siempre el mismo cuentico, si quiere aplique, ciudadano viceministro, muy hidalgamente, una solución parcial y por lo menos dígale a los que ocupan el poder que lo del imperio lo utilicen con menos frecuencia. Petitorio: 1. Que este recurso administrativo sea admitido por su despacho ministerial y sea declarado con lugar. 2. Que me devuelva la felicidad que tenía antes, o para quitarme la impresión de que era feliz y no lo sabía. 3. Que me sea restablecido en costas y en gastos por tanta corrupción que sufre mi adorada Venezuela. Por último, solicito de conformidad con la ley, una medida provisional -los abogados dicen cautelar- en el sentido de que le prohíba al señor Maduro, su jefe, que no haga más cadenas de televisión y de radio, con ello se tranquiliza él y nosotros, y que evite entonces hablar tanto para la felicidad de la patria. Espero pues, una respuesta que en esta oportunidad sea bien por caridad, conforme a derecho.
gbricenovivas@gmail.com
Además, quiero ser feliz, para que el dólar baje y el bolívar suba, y entonces pueda comprarme mis cosas todo contento y entusiasmado; quiero ser feliz para que quiten a esos sargentos que se encuentran en la Asamblea Nacional, sean más educados, y no se lo pasen insultando como en un cuartel a todos los otros que no están de acuerdo con ellos; quiero ser feliz, para evitar por favor, de decir que todo lo malo que pasa en el país es por culpa de los gringos o del imperio, la infelicidad me ocurre, sobre todo por el aburrimiento de oír siempre el mismo cuentico, si quiere aplique, ciudadano viceministro, muy hidalgamente, una solución parcial y por lo menos dígale a los que ocupan el poder que lo del imperio lo utilicen con menos frecuencia. Petitorio: 1. Que este recurso administrativo sea admitido por su despacho ministerial y sea declarado con lugar. 2. Que me devuelva la felicidad que tenía antes, o para quitarme la impresión de que era feliz y no lo sabía. 3. Que me sea restablecido en costas y en gastos por tanta corrupción que sufre mi adorada Venezuela. Por último, solicito de conformidad con la ley, una medida provisional -los abogados dicen cautelar- en el sentido de que le prohíba al señor Maduro, su jefe, que no haga más cadenas de televisión y de radio, con ello se tranquiliza él y nosotros, y que evite entonces hablar tanto para la felicidad de la patria. Espero pues, una respuesta que en esta oportunidad sea bien por caridad, conforme a derecho.
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